viernes, 22 de enero de 2010

Una vez de octubre de 1966 (fragmento)

Y es la tierra, mi tierra, el polvo mío,
el árbol de la noche sollozada,
las puntuales blancuras de la garza,
las luces de mis ojos, el trayecto
de una mirada a otra mirada. El cielo
que vuela de mis ojos a los cielos
de unos ojos terrestres y las nubes
que desbordan el canto...

Estoy todo lo iguana que se puede.

-Carlos Pellicer

martes, 19 de enero de 2010

Diálogo con el dentista

Los dentistas se mofan de que "Siempre te dejan con la boca abierta",
Pero no hay nada más ventajoso y lleno de alevosía que un dentista se ponga a negociar tu tratamiento al mismo tiempo que trabaja:

Llevas la boca abierta unos 2o minutos, tienes una mano con una manguerita aspirandote la baba que entre ratos te sofoca, mientras otra mano sostiene un artefacto abrazante que deambula entre tus dientes y cuyo ruido mantiene la piel de los brazos como de gallina.
Te agarras ambas manos con fuerzas mientras el artefacto explora tus encías y las hace sangrar, porque tus malos hábitos permitieron que el doctor viera sarro ahí. Estás en ese tormento cuando de pronto oyes una voz, - No es dios quien te habla- abres los ojos y no recuerdas a que hora los cerraste, y escuchas con más atención a través del ruido del aparato del demonio:

La limpieza y el diagnóstico cuestan 1,100 pesos, pero como vienes recomendado, te voy a cobrar 900, tienes 2 caries que tienen que ser quitadas para ponerte una resina, cada una cuesta 700 pesos, (sumas y ya van 2300) pero tengo que sacarte un par de radiografías, cada una cuesta 100 pesos (vuelves a sumar van 2500), te voy a decir que cepillo y que pasta vas a usar aunque te aviso que no es una pasta de dientes comercial por lo que sale un poco cara ok??? (sumas otra vez, quiza 2,700 pesos).
A ver, que le contestas, ¿como le contestas?, ¿abres mas los ojos? ¿los cierras? ¿le dices que no? ¿asientes con la cabeza? ¿tragas saliva?

No hay medio de defensa contra su diagnóstico, no hay nada que hacer, solo pensar en esos 2,700 pesos que no debiste gastarte en las vacaciones y en lo wey que fuiste por no cuidarte los dientes.